Varias pueden ser las circunstancias que pueden llevar a tomar la decisión de no renovar un nombre de dominio: cese de actividad, proyectos que no terminan de despegar o no han logrado el éxito esperado… En otras ocasiones no se trata de una decisión personal, sucede cuando un dominio está próximo a su fecha de renovación y no es posible contactar con el propietario del dominio por circunstancias técnicas o personales: datos de cliente obsoletos, bajas por enfermedad, cambio de responsable técnico en la empresa, etc. Sea cual sea el motivo, cuando un dominio no es renovado se genera una situación que puede crear problemas de comunicación y situaciones de riesgo.
Los riesgos de abandonar un dominio sin actuaciones previas
Es muy probable que las direcciones de email del dominio que ha decidido no renovar permanezcan activas en redes sociales (facebook, tuenti), como direcciones de contacto para cuentas de correo (gmail, hotmail) o incluso en comercio y banca electrónica (ebay, paypal). El abandono de un dominio sin las suficientes actuaciones previas puede poner en riesgo la privacidad e identidad de cualquier usuario o miembro de su organización que haya estado gestionando cualquiera de estos servicios proporcionando una dirección de correo de su dominio, pues en un corto periodo de tiempo, el dominio quedará libre para su registro y su nuevo propietario podrá hacer uso de las mismas direcciones de correo que usted ha estado utilizando cuando era de su propiedad.
Supuesto práctico de una situación de riesgo al abandonar un dominio
Imagine el supuesto en el que ha tomado la decisión de no renovar un nombre de dominio mediante el cual ha estado gestionando el correo de su empresa durante uno o varios años, el dominio queda libre y es registrado de nuevo. Sin intencionalidad aparente, el nuevo propietario de su dominio puede configurar el correo del dominio para recibir todos los mensajes enviados al mismo aunque la dirección del destinatario no exista todavía. Esta situación pondría en evidencia la existencia anterior de todas las direcciones de email que sigan recibiendo correo, por ejemplo mensajes de publicidad, de antiguos contactos comerciales, proveedores o mensajes informativos relativos a actualizaciones de servicios de internet.
Llegados a este punto el daño puede ser irreversible, pues haciendo uso de ingeniería social y los servicios de recuperación de contraseñas, alguien completamente ajeno a usted podría lograr identificarse con su identidad (o la identidad de cualquier miembro de su organización), recabar información confidencial y acceder a mensajes de correo con accesos a otros servicios de internet con el riesgo que conlleva.
Algunas recomendaciones si ha decidido no renovar su dominio
Estas son algunas recomendaciones para evitar riesgos si ha decidido no renovar un nombre de dominio.
- Compruebe si las direcciones de correo del dominio que va a expirar permanecen activas en otros servicios de internet. También es una característica muy común proporcionar direcciones de correo alternativas para recuperar el acceso a servicios de internet en caso de pérdida de acceso a la dirección principal.
- Informe a todos sus contactos de la caducidad de su dirección y proporcione una nueva dirección de correo (si fuera el caso) para mantener abierta una vía de comunicación.
- Transmita su inquietud por los riesgos que la nueva situación puede provocar a los todos los usuarios o miembros de su organización que hayan estado utilizando direcciones de email de su dominio para que realicen las mismas comprobaciones.
- El importe de la renovación de un nombre de dominio por un año es insignificante si se compara con el gasto mensual que debe soportar una empresa o un individuo, pues supone menos de 1 euro al mes. Haciendo uso del servicio de redirección de email que en Aemilius.net le ofrecemos de forma gratuita, puede mantener la propiedad de su dominio durante uno o varios años y continuar recibiendo todo el correo en la dirección de email que usted indique hasta estar completamente seguro que dejar expirar su dominio ya no entraña ningún riesgo.
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